– Infraccionan a automovilistas por traer autos con vidrios polarizados y ellos conducen patrullas y autos propios con el mismo problema. Además, tampoco portan cubrebocas ni siquiera al entrar a oficinas de la Delegación Centenario.
MEXICALI, B.C.- Una automovilista de Mexicali mostró este día su indignación porque agentes de la Policía Municipal de Tijuana le aplicaron una fuerte multa por conducir un automóvil con vidrios polarizados.
La conductora fue detenida por un patrullero cuando trataba de tomar la carretera con destino a la capital del Estado.
Dijo que después de que el oficial policíaco le dijo el motivo de la detención, éste se molestó cuando la automovilista le señaló que él mismo estaría incurriendo en la misma falta al Reglamento de Tránsito, ya que la patrulla que conducía también portaba vidrios polarizados.
Ante el señalamiento, dijo, el oficial les ordenó en forma déspota y prepotente que le quitaran «raspándole con sus llaves» el polarizado, o que los conduciría «a la comandancia» para ponerlos a disposición de un juez calificador «para que allá se inconformen y paguen la multa», les adelantó.
Dicho y hecho, una mujer identificada como Karina Chávez, quien dijo ser la juez calificadora, les confirmó la infracción y con ella tampoco valieron explicaciones, principalmente el hecho de que se trataba de una automovilista proveniente de la ciudad de Mexicali, donde traer los vidrios polarizados de los autos no es una infracción contemplada en el Reglamento.
La supuesta jueza le dijo que tendría que pagar una multa de MIL PESOS para que pudieran seguir su viaje a Mexicali, cosa que tuvieron que hacer.
Señaló la automovilista que al llegar a las instalaciones de la policía en la Delegación Centenario, observó dos situaciones también irregulares: los vehículos que pertenecen a los agentes o a directivos (y seguramente alguno de ellos también de la juez Chávez), tenían vidrios con un polarizado todavía más obscuro que el del auto en que ella viajaba. Además, y todavía más grave, dijo, observó que oficiales y funcionarios de la propia corporación policíaca, entraban y salían de las instalaciones sin portar cubrebocas, lo que constituye una falta grave a las disposiciones sanitarias dictadas por las autoridades de Salud y replicadas por las propias autoridades del Ayuntamiento de Tijuana.
Para que luego no digan que no es cierto todo eso que denunció, mostró fotografías sobre todos sus señalamientos.